Muchas son las dudas que le pueden surgir a uno cuando mencionamos “ Akantia”. Por desgracia, la sociedad construye una barrera en nuestros pensamientos. la cual nos impide que veamos otras realidades que aunque no las vemos, están allí. Esa barrera es la que no deja ver Akantia.
Desde el mismo momento en que nacimos, nos impusieron una forma de vida, la forma que permite que sigamos siendo ovejitas en el rebaño de crueles perros pastores, vasallos del sistema. Los buitres merodearan a nuestro alrededor, buscando una oportunidad para aprovecharse y así saciar su sed de dinero. Todo ella queda en manos de un pastor, el cual decidirá que es lo conveniente en cada caso. Pero no olvidemos, que el pastor busca su propio interés, y utiliza su rebaño para sacar riquezas a su costa.
Huye de ese corral que te mantiene preso, deja atrás esa monótona llanura de cemento, y adéntrate en el bosque, donde todo es naturaleza, armonía y libertad. El terreno te ofrecerá los alimentos necesarios para sobrevivir, y al final podrás campar a tus anchas, viviendo en paz con las demás especies, sin un sello grabado en tu piel el cual denomine tu origen.
Lamentablemente, ese bosque nos queda muy lejos. El corral esta muy bien montado, y no podemos escapar de el. Las demás ovejas se han moldado a su condición de vida, y mientras tengan el pienso diario, los problemas no existen. Akantia es posible, esta al otro lado de esa valla moral impuesta por los pastores.
Tenemos que tener cuidado con esos buitres que desde lo alto vigilan nuestros movimientos...no tenemos garras, ni una potente mandíbula como la tienen los perros que “ cuidan” de nosotr@s, la escopeta la guarda el pastor...
Quizás no podamos hacer nada...quizás nuestro destino estaba escrito antes de nuestro nacimiento, y estemos condenados su sistema que no elegimos. Pero en mi interior, reina Akantia. Quizás nuestro alrededor este contaminado por las cagadas de los buitres y los perros, esto huele mal...pero no podrán penetrar en mi interior ( tanto en sentido literal como en figurado, pa los mal pensaos), yo no soy una oveja. Tengo valores morales impuestos por mi mismo, tengo esperanzas en algo nuevo y diferente, creo en ese bosque por momento inalcanzable, creo en la verdadera libertad y armonía, soy Akantia....
No soy una oveja, soy una persona. No me mantienen preso los perros, me mantienen preso las fuerzas del estado y sus correspondientes leyes. No me acechan buitres de pico y pluma, me acecharan buitres disfrazados con traje y corbata. Mi pastor ni lleva boina ni lee antiguos cuentos de fábulas, el libro que sujeta es la constitución. No somos un rebaño, somos una sociedad. Sin miedo, huyamos aunque sea mentalmente de su mundo. Huyamos a Akantia.
29 de mayo de 2008
27 de mayo de 2008
26 de mayo de 2008
Caminado contra corriente
¿Por qué hablar tanto de la muerte, si solamente la veremos una vez en la vida y encima que, después de que nos haya abierto camino al otro mundo, ni siquiera se acordará de nuestro nombre? ¿Porque hablar tanto de ella, si sólo visita a los que no la esperan y hace esperar a los que desean conocerla? Pensar en su llegada hace que muchos pierdan el equilibrio y vivan intranquilos, expectantes, mordiéndose las uñas, asustándose con cualquier insignificante susurro. Porque la vida no es un juego de mesa y por ello, no es posible retirar las piezas y empezar una nueva partida cuando algo sale mal; hay que avanzar, aunque no tengamos más que cuatro peones; hay que resistir y seguir hacia delante luchando batalla tras batalla, sin rendirse, aunque nos tropecemos con cada piedra del camino y centenares de puñaladas nos impidan respirar con normalidad.
Por desgracia, no es hasta donde queremos llegar, sino lo que nos van a permitir alcanzar. No todo está en nuestras manos, el mundo es quien pone el límite y delimita nuestros movimientos. El futuro cada vez esta más crudo y lo que más me carcome es que no se haya encontrado aún alguna alternativa que lo solucione. Esa incógnita no para de darme vueltas por la cabeza, rebotando continua y duramente contra un cráneo ya debilitado por los golpes, haciéndome perder toda ilusión por continuar hacia delante. Pero como dice el compadre Agus, de los de marras, “así es la vida: por una que le robas ella cuarenta te quita; un juego sin sentido, un juguete del destino, así es la vida” y termina “así es la vida que me a tocado vivir y no me dieron a elegir y me como con patatas lo que tenga que venir”. Y la verdad que, como casi siempre, tiene mucha razón: la tierra sigue girando sin descanso y no podemos abandonar la partida, ni quedarnos quietos por miedo a resbalarnos en un suelo encharcado de lágrimas, de lluvia de desgracias; por precaución a poder abrirnos la cabeza en el golpe. Ante las trabas del camino tenemos que alzar la mirada, sacar pecho y continuar peleando, seguir para adelante, patinando contra corriente, saltando obstáculos, pisando el césped, dejando atrás las movidas, volando por encima del cielo, improvisando, que siempre será mejor que esperar quietos a que el mundo nos conduzca a la perdición. Yo lo intentaré y mientras me tenga en pie no voy a tirar la toalla. Soy consciente que los sueños no se regalan por la cara.
Estas palabras no son más que la representación de miles de ideas que me rondan por la cabeza. Escribir le ayuda a uno mismo a conocerse mejor, jugando a descolocar una mente saturada de pensamientos y preocupaciones sin ordenar. Y lo curioso que al final siempre llegamos al mismo punto, a lo que realmente importa, a reconocer lo afortunados que somos por estar vivos y poder vivir, propiamente dicho, con salud, amor y dinero. Porque pese a que nos encontremos flotando en un mar innavegable y no seamos marineros, siempre podremos buscar alguna alternativa, por muy mínima que sea, a esos quebraderos que nos hacen perder el norte y perdernos en este océano de penas y alegrias que es la vida. Hay que seguir caminando.
Por desgracia, no es hasta donde queremos llegar, sino lo que nos van a permitir alcanzar. No todo está en nuestras manos, el mundo es quien pone el límite y delimita nuestros movimientos. El futuro cada vez esta más crudo y lo que más me carcome es que no se haya encontrado aún alguna alternativa que lo solucione. Esa incógnita no para de darme vueltas por la cabeza, rebotando continua y duramente contra un cráneo ya debilitado por los golpes, haciéndome perder toda ilusión por continuar hacia delante. Pero como dice el compadre Agus, de los de marras, “así es la vida: por una que le robas ella cuarenta te quita; un juego sin sentido, un juguete del destino, así es la vida” y termina “así es la vida que me a tocado vivir y no me dieron a elegir y me como con patatas lo que tenga que venir”. Y la verdad que, como casi siempre, tiene mucha razón: la tierra sigue girando sin descanso y no podemos abandonar la partida, ni quedarnos quietos por miedo a resbalarnos en un suelo encharcado de lágrimas, de lluvia de desgracias; por precaución a poder abrirnos la cabeza en el golpe. Ante las trabas del camino tenemos que alzar la mirada, sacar pecho y continuar peleando, seguir para adelante, patinando contra corriente, saltando obstáculos, pisando el césped, dejando atrás las movidas, volando por encima del cielo, improvisando, que siempre será mejor que esperar quietos a que el mundo nos conduzca a la perdición. Yo lo intentaré y mientras me tenga en pie no voy a tirar la toalla. Soy consciente que los sueños no se regalan por la cara.
Estas palabras no son más que la representación de miles de ideas que me rondan por la cabeza. Escribir le ayuda a uno mismo a conocerse mejor, jugando a descolocar una mente saturada de pensamientos y preocupaciones sin ordenar. Y lo curioso que al final siempre llegamos al mismo punto, a lo que realmente importa, a reconocer lo afortunados que somos por estar vivos y poder vivir, propiamente dicho, con salud, amor y dinero. Porque pese a que nos encontremos flotando en un mar innavegable y no seamos marineros, siempre podremos buscar alguna alternativa, por muy mínima que sea, a esos quebraderos que nos hacen perder el norte y perdernos en este océano de penas y alegrias que es la vida. Hay que seguir caminando.
Poema: Los nadies
Un maravilloso poema de Eduardo Galeano (Montevideo, 3 de septiembre de 1940), periodista y escritor uruguayo, una de las personalidades más destacadas de la literatura iberoamericana, que plasma la injusticia social que hay en el planeta. Bonitas palabras con expresivas imagenes de la misería de un mundo que desconocemos.
Kutxi Romero: entrevista
Esto, lo hemos sacado de Youtube y lo hemos colgado porque creemos que es un documento bastante interesante.
10 de mayo de 2008
No te rindas
Largas praderas cobijan tus sueños
Ancianos olivos los sumergirán
En un mundo donde no haya ni rencor ni miedo
Donde el daño no te alcanzará
La noche cae, lentamente el silencio
Devolviéndote al duro suelo
Una vez mas llegas tarde a tu casa
Niña ¿no ves que solo ha sido un sueño?
***
Aquí no hay bosques ni cielo ni lluvia ni na'
Solo el rencor que genera la vida al pasar
Un día tras otro, vivir para currar
Malgastando tu tiempo en necias esperanzas
No te rindas, no les dejes que te ocupen
Cuando la vida está chunga siempre hay que seguir!!
No te calles mas, no pares de volar
Cuando sientas que ya no hay nada, hay mucho que decir!!
No te des por vencida, no dejes que te ocupen
Cuando la vida está chunga siempre hay que seguir!!!
No te calles mas, no pares de volar
Cuando sientas que ya no hay nada, hay mucho que decir!!!
Si!! Hay mucho que decir!!
***
Et si les choses sont difficiles souris.
Séche les larme avec le chaleur de l'amour
et ne te rende pas, attrape ma main
Je ne te lausseroi pas
Après tout, cette vie est la chose unique que tu as
Y cuando alguno te intente poner la pata
No hacen más que hacerte más fuerte
Porque los vientos del norte traerán un nuevo día
Porque tu presencia deja encharcados los corazones.
***
No te rindas, no les dejes que te ocupen
Cuando la vida está chunga siempre hay que seguir!!
No te calles mas, no pares de volar
Cuando sientas que ya no hay nada, hay mucho que decir!!
No te des por vencida, no dejes que te ocupen
Cuando la vida está chunga siempre hay que seguir!!
No te calles mas, no pares de volar
Cuando sientas que ya no hay nada, hay mucho que decir!!
***
Paso a paso, mano a mano
que la vida son dos dias...
Paso a paso, mano a mano
Dejando un banquito libre para los que quieran descansar
Que la vida son dos días
Y como decían Malos Vicios uno y medio es pa’ currar
No dejes que pisoteen tus sueños
No les dejes que te dejen a un lado y sin mirar
Vive tu vida, vive sin perjudicar
Estoy contigo amiga mía, atrévete a pensar.
9 de mayo de 2008
Akantia
En el universo o en el mundo Akantia todo es soltura, te liberas de las cadenas del sistema y cortas los hilos con los que te manejan los buitres que vuelan sobre ti.
En Akantia, todo es natural y no tenemos patria ni banderas, solamente amor incondicional al compadre y al compañero.
Antes de que el mundo tuviera la forma actual -de que el mundo fuera mundo- era Pangea; y todos vivíamos unidos y en armonía. Fue allí donde se creo la primera sociedad, la única verdadera que ha existido, lejos de la opresión y la hipocresía actual, donde se le tendía la mano al amigo y al desconocido, sin miedo a ser traicionado.
La naturaleza creó un espacio, un paraíso terrenal para el ser humano. Pero el egoísmo hizo que poco a poco fuésemos destruyendo eso que a cambio de nada se nos había entregado, lo cual provocó la ira de la madre de las madres. Esa mala leche, se plasmó en el viento, que hace que ocurran desastres para que nos demos cuenta del daño que le estamos haciendo.
“Lo que ignoramos, lo ignoramos completamente”. Ahora mismo no somos conscientes de la poca iniciativa y falta de voluntad que tenemos para hacer lo que nos apetezca. Somos un rebaño de ovejas, que a través de los pastores opresores se nos maneja al antojo del buitre pastor, creador de las reglas de su propio juego, del cual somos simples piezas. Se nos ha enseñado a no creer en aquello que no se ve. Y de eso se valían para manejarnos, ocultando la información que no quieren que sepamos. Ocultando la existencia de este mundo. La existencia de Akantia.
Vivir de forma Akantia no esta delimitado por normas, cualquiera puede entrar en este mundo.
Akantia no es anarquía, pero si que tiene algo que ver. En Akantia todo es soltura, te liberas de las cadenas del sistema y cortas los hilos con los que te manejan los buitres que acechan sobre ti. Las propias reglas las implantamos nosotros mismos, sin previo acuerdo colectivo, únicamente con lo que nos dicte el alma.
Se trata de vivir como los animales del bosque: apalancado felizmente disfrutando de la verdadera belleza de la vida: la Naturaleza.
En Akantia, todo es natural y no tenemos patria ni banderas, solamente amor incondicional al compadre y al compañero.
Antes de que el mundo tuviera la forma actual -de que el mundo fuera mundo- era Pangea; y todos vivíamos unidos y en armonía. Fue allí donde se creo la primera sociedad, la única verdadera que ha existido, lejos de la opresión y la hipocresía actual, donde se le tendía la mano al amigo y al desconocido, sin miedo a ser traicionado.
La naturaleza creó un espacio, un paraíso terrenal para el ser humano. Pero el egoísmo hizo que poco a poco fuésemos destruyendo eso que a cambio de nada se nos había entregado, lo cual provocó la ira de la madre de las madres. Esa mala leche, se plasmó en el viento, que hace que ocurran desastres para que nos demos cuenta del daño que le estamos haciendo.
“Lo que ignoramos, lo ignoramos completamente”. Ahora mismo no somos conscientes de la poca iniciativa y falta de voluntad que tenemos para hacer lo que nos apetezca. Somos un rebaño de ovejas, que a través de los pastores opresores se nos maneja al antojo del buitre pastor, creador de las reglas de su propio juego, del cual somos simples piezas. Se nos ha enseñado a no creer en aquello que no se ve. Y de eso se valían para manejarnos, ocultando la información que no quieren que sepamos. Ocultando la existencia de este mundo. La existencia de Akantia.
Vivir de forma Akantia no esta delimitado por normas, cualquiera puede entrar en este mundo.
Akantia no es anarquía, pero si que tiene algo que ver. En Akantia todo es soltura, te liberas de las cadenas del sistema y cortas los hilos con los que te manejan los buitres que acechan sobre ti. Las propias reglas las implantamos nosotros mismos, sin previo acuerdo colectivo, únicamente con lo que nos dicte el alma.
Se trata de vivir como los animales del bosque: apalancado felizmente disfrutando de la verdadera belleza de la vida: la Naturaleza.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)
